4 de febrero (Reuters) – El operador de cruceros Royal Caribbean Group dijo el viernes que la propagación relámpago de la variante del coronavirus Omicron retrasaría su vuelta a la rentabilidad unos meses, otro golpe para una de las empresas más afectadas por la pandemia.
La sombría predicción, así como una pérdida trimestral mayor de la esperada, hizo que las acciones de Royal Caribbean cayeran un 4% y también pesaron sobre las de sus rivales Carnival Corp y Norwegian Cruise Line Holdings Ltd.
La oleada de Omicron ha obligado en los últimos meses a los operadores de cruceros a cambiar los itinerarios de sus viajes e incluso a cancelarlos, estancando una incipiente recuperación del sector cuyos buques han pasado la mayor parte de la pandemia anclados en puertos estadounidenses.
«El momento de Omicron fue especialmente doloroso, ya que el típico periodo de reserva de olas comienza a principios de enero», dijo el consejero delegado Jason Liberty en una llamada de resultados.
El propietario de Celebrity Cruises espera tener pérdidas en el primer semestre de 2022 antes de volver a ser rentable en los seis meses siguientes. Los analistas encuestados por Refinitiv habían estimado una pérdida para el primer trimestre y una vuelta a los beneficios en el segundo.
«(La recuperación) va a seguir retrasándose y vamos a tener retrasos y arranques y paradas hasta que se acabe la pandemia», dijo Ivan Feinseth, director de inversiones de Tigress Financial Partners.
El resurgimiento de los casos de COVID-19 ha provocado una advertencia contra los viajes en crucero por parte de la agencia sanitaria estadounidense y ha obligado incluso a los pasajeros frecuentes de los cruceros a abstenerse de viajar.
En el cuarto trimestre, los ingresos totales se situaron en 982,2 millones de dólares, por debajo de las estimaciones de los analistas de 1.040 millones de dólares. La pérdida ajustada por acción, de 4,78 dólares, también superó las expectativas de 3,92 dólares.
Sin embargo, Royal Caribbean afirmó que las reservas se recuperaron a finales de enero y volvieron a los niveles anteriores a Omicron, y que las cancelaciones también disminuyeron.
