La amenaza de huelgas en los muelles de Felixstowe y Liverpool el próximo mes, junto con la posible reanudación de las acciones industriales en los puertos alemanes, se suman a los problemas de la cadena de suministro de los cargadores de Asia a Europa del Norte.
Por otra parte, el riesgo de que las redes de transportistas sufran nuevas perturbaciones al intentar sortear la mayor congestión en los puertos centrales del norte de Europa puede frenar el descenso de los precios al contado de los contenedores en la ruta comercial, a pesar del debilitamiento de la demanda.
Sin embargo, casi la mitad de los cargadores ya no confían en la estabilidad de las tarifas contractuales, que están bajo presión, y los transportistas pueden esperar recibir solicitudes de renegociación a medida que la temporada alta se desvanece y comienza la temporada baja.
Mientras tanto, la lectura del Índice Freightos del Báltico (FBX) de esta semana para Asia-Norte de Europa registró una caída del 6%, hasta los 9.641 dólares por 40 pies, ya que los transportistas aumentaron sus descuentos para mitigar la escasez de reservas.
En los puertos del Mediterráneo, donde la demanda se ha mantenido mejor, el componente FBX bajó un 1,5% en la semana, hasta 11.848 dólares por 40 pies.
En el transpacífico, los fletes al contado desde Asia a la costa oeste de EE.UU. siguieron cayendo, y el FBX se redujo otro 6% esta semana, hasta 6.593 dólares por 40 pies, lo que representa un descenso interanual del 64%.
Sin embargo, las tarifas para la costa este de Estados Unidos aumentaron un 4%, según el FBX, hasta los 10.316 dólares por 40 pies, gracias a la congestión en los puertos de la costa oeste, pero siguen siendo un 47% más bajas que hace un año.
El analista estadounidense Jon Monroe afirmó que el comercio minorista de Estados Unidos se ha visto «muy afectado» y que la mayoría de los grandes minoristas están ralentizando o limitando las entregas.
«Los consumidores se están volviendo más selectivos en sus compras y comprando sólo lo que necesitan», dijo, añadiendo que el producto en las tiendas minoristas «no se está moviendo fuera de los estantes lo suficientemente rápido».
«Esto es en parte responsable de que los almacenes estén llenos y de que los contenedores permanezcan en sus patios», dijo.
En las próximas semanas, otros transportistas marítimos presentarán resultados récord en el segundo trimestre, pero hay indicios de que el auge del sector de las líneas marítimas de los dos últimos años está empezando a remitir.
De hecho, en su actualización del mercado de Asia-Pacífico de julio, Maersk se refiere a un «debilitamiento más amplio de la demanda», añadiendo: «Las perspectivas siguen siendo muy inciertas, y vemos principalmente riesgos a la baja en nuestro escenario base».
Y, como reflejo de este riesgo a la baja, la encuesta de este mes de la empresa de referencia de fletes Xeneta sobre su base de clientes con contratos a largo plazo encontró que muchos de los encuestados estaban «buscando renegociar las tarifas contratadas, dadas las recientes caídas del mercado al contado».
El director general, Patrik Berglund, dijo: «Las señales son claras, hay un cambio de opinión a medida que evolucionan algunos aspectos fundamentales. Nuestros clientes, principalmente cargadores de gran volumen, se encuentran ahora en una posición negociadora más fuerte».
«Nuestra encuesta mostró que el 44% ya no confía en la estabilidad de los contratos a largo plazo, y de ese 44%, un 22% dijo que era más probable que asignara volúmenes más bajos sólo a contratos más baratos; mientras que el 22% prefería trasladar la asignación al mercado al contado tan pronto como los precios cayeran por debajo de las tarifas a largo plazo».
Referencia: gcaptain.com
