MOL anunció que ha decidido invertir en Larvik Shipping AS, empresa de gestión de buques de transporte de CO2 licuado basada en Noruega, lo que marca la primera incursión de MOL en este negocio.
El transporte marítimo de CO2 licuado desempeña un papel fundamental en las cadenas de valor de la captura, utilización y almacenamiento de dióxido de carbono (CCUS) como medio de conectar eficazmente los lugares de recogida con los de almacenamiento o utilización. El CCUS está llamando la atención como tecnología para recoger y almacenar el CO2 o utilizarlo de forma eficaz, y como un paso hacia la realización de una sociedad con bajas emisiones de carbono. Según un informe de la Autoridad Internacional de la Energía (AIE), el CCUS tiene como objetivo una reducción del 15% de las emisiones acumuladas de CO2 para 2070. Se espera que esto contribuya a una reducción de unos 6.900 millones de toneladas al año cuando se alcance la carbono neutralidad.
Larvik Shipping lleva más de 30 años gestionando tanqueros industriales de CO2 licuado que prestan servicio en Europa, y cuenta con un sólido historial de transporte seguro de CO2 licuado y amplios conocimientos de manipulación de cargas.
De este modo, MOL pronto entrará en el negocio del transporte marítimo de CO2 licuado, que está posicionado para un crecimiento significativo al ritmo de la creciente adopción del CCUS.
El rol de MOL será contribuir a una mayor expansión del negocio, combinando su experiencia acumulada y sus capacidades tecnológicas en la operación segura con sus conocimientos, sumados a la sólida experiencia de Larvik Shipping.
Ambas empresas debatirán la adopción de buques más grandes con vistas a la expansión tanto en la fase previa como en la posterior y en la cadena de valor del CCUS.
MOL en su plan de gestión Rolling Plan 2020, se centra en contribuir a la consecución de una sociedad descarbonizada mediante la «Promoción de estrategias medioambientales y el desarrollo de negocios libres de emisiones para convertirlos en un negocio principal».
